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Marco geográfico y mitológico. Cicely (Alaska): el Estado Mental de la última frontera

 

Sabiduría envuelta en una historia humorística que, en última instancia, nos está hablando de nuestra propia historia ” Jodorowsky 46 .

 

Es difícil definir a qué género pertenece Northern Exposure porque es un producto híbrido de gran riqueza intertextual. El posmodernismo, uno de los fenómenos más representativos de nuestra época, trasciende al mundo de la televisión aunque, como reflexiona Thornton Caldwell, aplicar la Teoría del Posmodernismo al medio televisivo es más complejo de lo que pueda parecer a simple vista porque “(...) theory cannot be used easily to distinguish between what is posmodern and what is not posmodern in American television. (...) Television history, unlike Hollywood film history, cannot be as neatly periodized into sequencial stylistic categories: primitive, classical, baroque, modern and postmodern 47”.

Una de las características del posmodernismo es el pastiche, la mezcla de estilos, formas y niveles. Este rasgo posmodernista se refleja en el mundo de la televisión – “In these ways, then, television has always been posmodern. Television has always been textually messy- that is, textural rather than transparent 48 ”- donde hay una gran disparidad de programas entre la que, a veces, aparecen productos televisivos muy difíciles de clasificar como es el caso de la serie que nos ocupa.

La mencionada dificultad establecida por Thornton Caldwell respecto a la aplicación de la Teoría del Posmodernismo en la televisión nos obliga a ser cautos respecto a la consideración de Northern Exposure como obra posmoderna. De algún modo lo es porque presenta una mezcla de géneros -muchos afirman que es un dramedy 49- y formas. Como afirma Caldwell al hablar del problema de la imagen; “With (...) Northern Exposure (...) the viewer is encouraged to speculate before each episode about what the program might aesthetically transform itself into this week; documentary, dreamstate, oral history, music video, homage to Hollywood, or expressionist fantasy 50”. Northern Exposure puede además ser considerada posmoderna porque es una obra con metalenguaje que llega en ocasiones a interrumpirse a sí misma. Como en la escena del duelo entre Nikolai Ivanovich Apalanov (Elya Baskin) y Maurice Minnifield (Barry Corbin) en el episodio “War and Peace” (2.06) donde los actores, saliéndose de sus personajes, discuten el guión y deciden dejar el duelo y pasar directamente a la siguiente escena. También porque critica el racionalismo metódico de la cultura occidental y rompe con el mito del hombre racional como medida de todas las cosas haciendo que el escéptico y científico modo de pensar del personaje Joel Fleischman (Rob Morrow) experimente constantes dudas y temores a lo largo de la serie. Como contraposición al racionalismo de Joel, Northern Exposure presenta y, a menudo critica por igual, el relativismo filosófico y poético de Chris Stevens (John Corbett).

Jesús González Requena afirma que “ La posmodernidad es, en suma, la crisis del mito, de cualquier mito 51 ”. Es verdad que, al romper con el mito del héroe racional, Northern Exposure encaja en esta definición del posmodernismo pero Requena también asegura que el posmodernismo es una “crisis radical de todo sistema de valores y de todo relato. La posibilidad misma del relato –entendida en su más profunda dimensión antropológica- exige la presencia (...) de algún valor trascendente. En tanto valor, permite a los individuos acceder a un modelo para su conducta; en tanto trascendente, permite pensar el presente en relación a un futuro que lo vectorialice y lo dote de sentido 52. Llegado a este punto vemos que Northern Exposure no presenta únicamente rasgos posmodernos porque en esta creación de Joshua Brand y John Falsey el papel del mito, a menudo como relato terapéutico, es crucial. Lo cierto es que el origen de la sociedad de Cicely es de una estética marcadamente modernista –que no posmodernista- como puede apreciarse en el relato fundador narrado en el episodio “Cicely” (3.23).

Aunque Northern Exposure presenta y mezcla elementos muy dispares, como en el posmodernismo, no lo hace de manera arbitraria, desordenada ni pesimista sino hallando un significado final de conjunto en cada episodio. En Northern Exposure se fabrica la unidad con una sensibilidad modernista porque se hace a través de fragmentos o yuxtaposiciones de distintos elementos. En esta serie se halla la unidad a través de la diversidad mientras que en el posmodernismo el hallazgo o la creación misma de unidad se había olvidado. De algún modo entonces Northern Exposure está en la frontera entre modernismo y posmodernismo, no en vano encaja en el concepto de Forum Cultural sobre el que reflexionan Newcomb y Hirsch al presentar múltiples puntos de vista gracias a la variedad de personajes –“ The complex ensemble enables a wide range of perspectives to be expressed on the show 53 ”- , de este modo Cicely, Alaska se convierte en un espacio de diálogo en el que las fronteras se difuminan; “(...)for the most part the rethoric of television drama is a rethoric of discussion. Shows such as All in the Family (...) which raise the forum/ discussion to an intense and obvious level, often make best use of the medium and become highly sucessful 54”.

Esta desaparición de fronteras y la presencia de elementos de orígenes tan dispares genera la polémica y la dificultad existentes a la hora de decir a qué género pertenece este inesperado éxito televisivo que fue Northern Exposure . Esta serie es un producto híbrido de gran riqueza intertextual, en ella es muy importante la dicotomía de cosas aparentemente contradictorias. Encontramos comedia versus drama, hombre versus mujer, ciencia versus magia, realidad versus fantasía, historia versus mito, medicina versus shamanismo, memorias del pasado versus discusiones sobre el futuro. El espectador se sitúa en la frontera de estos términos antagónicos y experimenta cómo estas líneas divisorias son o se van haciendo borrosas. Términos en un principio opuestos encuentran puntos en común y el espectador no sólo contempla la aparición de esta intersección entre sus mundos sino que participa en su creación. Como dice M.Taylor, en esta serie “ races and cultures are not divided but are complementary 55 ”. Northern Exposure halla como pocas series han logrado hacer antes o después, lo que Durand describe como el “ punto del espíritu en que la vida y la muerte, lo real y lo imaginario, el pasado y el futuro, lo comunicable y lo incomunicable (…) dejan de ser percibidos contradictoriamente (...) captamos(…) el proceso de inversión que pasa por una relativización de los términos y que llega incluso a invertir el sentido común y la lógica haciendo entrar lo grande en lo pequeño 56 ”.

En Northern Exposure se refleja la importancia del desarrollo de los seres humanos como tales, de su transformación no sólo física sino sobretodo, mental y espiritual. Para ello se muestra una variada galería de personajes, cada uno con sus excentricidades y peculiares rasgos de personalidad, en un pequeño pueblo fronterizo de Alaska llamado Cicely. La trascendencia de la índole de los personajes es crucial, John Cullum (Holling Vincoeur) afirma lo siguiente; “I think of NX as a comic drama. It´s humor derives often from the unexpected behavior of the characters 57 ”.

La serie arranca cuando Joel Fleischman (Rob Morrow), un judío de New York doctorado en Medicina por la Universidad de Columbia, llega a Cicely (Alaska) para cumplir con un servicio de 4 años según dicta la beca escolar que firmó con el Estado de Alaska para costear sus estudios. Joel es el pez fuera del agua y Cicely es “la matriz de la mujer (...) en la que es introducido el pez 58”. Toda la serie narra el ritual de nutrición de Joel en/por Cicely. Según Wilcox 59 “Fleischman” proviene del alemán “flesh-man”, algo indicativo del carácter de Joel que es un médico que básicamente cree sólo en lo material y muy poco en lo espiritual. Como dice Jung en su estudio sobre la génesis del héroe “Poner nombre significa (…) conferir una determinada personalidad o alma 60 ”.

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NOTAS Y REFERENCIAS

46 JODOROWSKY, Alejandro. La sabiduría de los cuentos. Ediciones Obelisco.

47 THORNTON CALDWELL, John. “Excessive Style. The Crisis of Network Television” . Pág. 665. En Newcomb, Horace editor. Op. Cit. 649-686.

48 Ibid. Pág. 668.

49 “Dramedy is best understood as a television program genre which fuses elements of comedy and drama (...). Other television series which some critics have called dramedies include (...) Northern Exposure”. VANDE BERG, Leah R. “Dramedy”. Pág. 529. En Newcomb, Horace editor. Encyclopedia of television . Ed. Chicago. Fitzroy Dearborn Publishers, 1997. Vol 1 (A-F). Págs. 529-530.

50 THORNTON CALDWELL, John. Televisuality. Style, Crisis and Authority in American TV . George F.Custen, series editor. Op. Cit. Pág. 92.

51 GONZÁLEZ REQUENA, Jesús. El discurso televisivo: espectáculo de la posmodernidad . 4ª edición. Ediciones Cátedra. Signo e Imagen, 1999. Pág. 153.

52 Ibid.

53 WILLIAMS, Betsy. Op. Cit. Pág. 142.

54 NEWCOMB, Horace & HIRSCH, Paul M. “Television as a Cultural Forum” . En Newcomb, Horace editor. Op. Cit. Pág. 508.

55 TAYLOR, Annette. “Landscape of the West in Northern Exposure ”. The Mid-Atlantic Almanac: The Journal of the Mid-Atlantic Popular/ American Culture Association . Greencastle, Pennsylvania, 1994. p..30.

56 DURAND, Gilbert. Las estructuras antropológicas de lo imaginario. Introducción a la arquetipología general. Taurus. Madrid. 1982. pp. 199 - 200.

57 Entrevista a Mr. John Cullum (Holling Gustav Vincoeur) realizada por mi misma el 2 de abril de 2002. Publicada en North to the Future en www.cicelyonline.com

58 DURAND, Gilbert. Op. Cit. p. 206.

59 WILCOX, Rhonda. “In Your Dreams, Fleischman: Dr. Flesh and the Dream of the Spirit in Northern Exposure ”. Studies in Popular Culture. Louisville, Kentucky, 1993. p. 1.

60 JUNG, Carl Gustav. Símbolos de transformación. 1ª ed, 1963. 4ª reimpresión, 1998. Ediciones Paidós, Barcelona. Edición revisada y aumentada de Transformaciones y símbolos de la líbido . Supervisión y notas de Enrique Butelman. 7. p. 201.