Uno
de los personajes más logrados ha sido Gollum-Sméagol.
En primer lugar hay que recordar que se trata de una creación
digital, y en segundo que buena parte de su éxito estaba supeditado
a un guión que debía de desdoblar su personalidad en dos
caras opuestas. Podemos adelantar que se ha obtenido un resultado inmejorable,
apoyado en imágenes espejo como el agua o en perfiles invertidos,
logrando que el espectador captara la lucha interior de la pervertida
criatura. Los gestos faciales de Gollum, ora inocentes, ora malignos,
son memorables.
Menos
éxito se ha tenido en explicar algunos personajes, como Denethor,
el Senescal de Gondor, y padre de Boromir y Faramir. En la película
se le presenta como completamente trastornado por la pérdida
de Boromir, y desesperado por la fuerza del Enemigo. Sin embargo, no
se explica que Sauron ha cautivado su mente a partir de un Palantir
que existe en su palacio, cosa que la novela se encargaba de aclarar.