Pero
antes de todo esto, en Rusia y coincidiendo con la revolución
bolchevique, surgió un importante realizador, Dziga Vertov, que
se encargó de la recopilación y exhibición de el
mayor número de imágenes sobre la guerra civil que estaban
sufriendo hasta acabar creando un semanal fílmico y formando
parte del NPE o Consejo de los tres, desde donde lanzó un manifiesto
en lo que llamaron Kino-Pravda, o lo que seria su traducción,
Cine-Verdad, para la realización de películas que
mostraran la realidad soviética en contra de las películas
de ficción que llegaban del extranjero y que consideraba, al
igual que la religión, "el opio del pueblo". En este
capítulo el autor nos explica con detalle el trabajo de este
grupo de realizadores y las críticas que recibieron mediante
la trascripción de diferentes fragmentos de las obras de Vertov.
En
consonancia con esta idea del cine-verdad, surgió una tendencia
que aun estando más interesada en el componente estético
del documental que en el argumental seguía la tónica de
Vertov. Consideraban el cine como un arte pictórico y se reunían
en cine-clubs. En este grupo, Barnouw incluye a autores como Walter
Ruttman y Alberto Cavalcanti, ambos con dos grandes obras como Berlín,
sinfonía de una gran ciudad y Solo las horas, respectivamente,
que el mismo Barnouw se encarga de analizar y comparar detalladamente
ya que las dos hacen un retrato de dos grandes capitales europeas, Berlín
y París. Según Barnouw, este movimiento tuvo una corta
existencia debido al surgimiento del cine sonoro, hecho que rebajó
el interés por las imágenes.
Como
hemos ido viendo hasta ahora, hay gran cantidad de tendencias y/o movimientos
en la historia del documental, pero eso no es todo, ya que Barnouw aún
pone más énfasis en las exposiciones de las siguientes
corrientes de temática más social como pueden ser los
documentales de propaganda o los históricos.
Para
explicar los primeros, los propagandísticos, el autor utiliza
las palabras de John Grierson, que considera que la función del
documental es la de guiar y sensibilizar a la población ante
las situaciones conflictivas y mejorar así su estilo de vida.
Es para ello que este realizador halló en la EMB Film Unit (la
unidad fílmica de una empresa comercial inglesa) el motor necesario
para educar a los obreros y, de paso, realzar el Imperio británico
y su consolidación comercial.
Esta
intrusión gubernamental en el mundo del documental se vio más
claramente en Alemania con la política de Goebbels y la aparición
de una realizadora como Leni Riefenstahl, que aún trabajando
para el gobierno de Hitler hizo obras maestras en el campo del cine
de propaganda.
Pero no únicamente se realizaba este tipo de cine en regímenes
absolutistas como éste o anteriormente el soviético, el
documental propagandístico también se realizaba en el
llamado "mundo libre" como en USA, grandes maestros en el
campo de la ficción, pero que con la política de Hoover
se centró más en los noticiarios, donde daban mensajes
de optimismo aún estando en plena crisis económica. Fue
por ello que surgió la Liga Nacional de Filmografía y
Fotografía dedicada a documentar el mayor número de sucesos
provocados por la crisis y posteriormente hacer pases, abiertos a todo
el que estuviera interesado, en diferentes cine-clubs de todo el país.
Por cosas del destino, este grupo acabó trabajando para el Gobierno,
cuando Roosevelt llegó a la Casa Blanca y dio su apoyo a quien
promocionara su política del New Deal.
Otro
tipo de filmes de propaganda son los realizados en períodos de
guerra como los que surgieron durante la Guerra Civil española,
en ambos bandos y en la Guerra de China contra Japón. En este
tipo de documentales, y también películas de ficción,
se trataba de mostrar al enemigo como un auténtico monstruo y
a sus soldados como auténticos héroes, es decir, el mismo
tipo de cine resultado de cualquier guerra. Aunque el caso de la Guerra
Civil española es diferente, ya que los documentales del lado
republicano fueron realizados por artistas e intelectuales de todo el
mundo que intentaban luchar contra la política mundial de no-intervención.