ARGO: "LA MEJOR MALA IDEA" DE AFFLECK

Por Tara Karajica

T. O.: Argo. Producción: GK Films & Smoke House, para Warner Bros. Pictures (USA, 2012). Productores: Ben Affleck, George Clooney y Grant Heslov. Director: Ben Affleck. Guión: Chris Terrio basado en el artículo del Wired Magazine de Joshuah Bearman “Escape from Tehran” y una selección de The Master of Disguise de Antonio J. Mendez. Fotografía: Rodrigo Prieto. Música: Alexandre Desplat. Diseño de producción: Sharon Seymour. Vestuario: Jacqueline West. Montaje: William Goldenberg.

Intérpretes: Ben Affleck (Tony Mendez), Bryan Cranston (Jack O’Donnell), Alan Arkin (Lester Siegel), John Goodman (John Chambers), Victor Garber (Ken Taylor), Tate Donovan (Bob Anders), Clea DuVall (Cora Lijek), Scoot McNairy (Joe Stafford), Rory Cochrane (Lee Schatz), Christopher Denham (Mark Lijek), Kerry Bishé (Kathy Stafford), Kyle Chandler (Hamilton Jordan), Chris Messina (Malinov), Željko Ivanek (Robert Pender), Titus Welliver (Bates), Keith Szarabajka (Adam Engell), Bob Gunton (Cyrus Vance), Richard Kind (Max Klein), Richard Dillane (OSS Officer Nicholls), Omid Abtahi (Reza Borhani), Page Leong (Pat Taylor), Sheila Vand (Sahar), Taylor Schilling (Christine Mendez), Aidan Sussman (Ian Mendez), David Sullivan (Jon Titteron), Rob Brownstein (Landon Butler), Matt Nolan (Peter Genco), J. R. Cacia (Brice), Lindsey Gintler (Hedley Donovan) y John Woodward Kirby (Fred Kupke).

Color - 120 min. Estreno en España: 26-X-2012.


Argo, la nueva realización de Ben Affleck es una película de suspense que narra la urgente operación encubierta, “Canadian Caper”, para rescatar a seis americanos, que se desarrolló tras las bambalinas de la crisis de rehenes de Irán de 1979, teniendo como enfoque el poco conocido papel que jugaron la CIA y Hollywood, una información que no fue desclasificada por el Presidente Clinton hasta 1997.

En efecto, el 4 de noviembre de 1979, en plena revolución iraní, los militantes atacaron la embajada de los Estados Unidos en Teherán, tomando a cincuenta y dos americanos como rehenes. Pero, en el medio de la agitación, seis americanos lograron escapar, encontrando refugio en la casa del Embajador canadiense, Ken Taylor. Sabiendo que era cuestión de tiempo antes de que lo seis fuesen encontrados y seguramente ejecutados, los gobiernos canadiense y americano pidieron a la CIA que interviniese. La CIA entonces recurrió a su mejor especialista en “extrafiltración”, Tony Mendez, para que elaborase un plan para sacar a los seis americanos fuera de Irán de manera segura. El plan era una película de ciencia-ficción falsa, un plagio de La guerra de las galaxias, rodado en Irán por un equipo de filmación canadiense. Su título: Argo.

Esta Argo fue coproducida por George Clooney y Grant Heslov, quienes habían trabajado previamente juntos en la película elogiada por la crítica, Goog Night, and Goog Luck. La cinta de Ben Affleck es un thriller político finamente hecho, basado en el artículo de Joshuah Bearman aparecido en el Wired Magazine “The Escape From Tehran” y una selección de The Master of Disguise de Antonio J. Mendez, que inteligentemente hace malabarismo con las numerosas partes de la narración, así como con una historia animada del siglo XX iraní como introducción al tema de la película. Ben Affleck no sólo se hace valer como un director de alto nivel con esta realización, sino que también demuestra no ser tan mal actor cuando se dirige a sí mismo. Logra mantener la acción a una velocidad rápida que nunca se vuelve tediosa, llevando la tensión y el suspense a niveles insoportables. La película también tiene un lado cómico oscuro, burlándose de Hollywood con suma exactitud. Hay también una gran atención al detalle y a la veracidad histórica.

Efectivamente, Affleck hace todo lo posible para hacer los pequeños detalles creíbles yendo de la ropa, el estilo y otros elementos de la época, cortesía de la diseñadora del vestuario Jacqueline West, y la estética de la cinta que recrea los años 70 a la perfección con el trabajo visual impecable del director de fotografía Rodrigo Prieto, al logo W de Warner Bros. usado desde 1972 hasta 1984 por la compañía en los créditos de apertura en vez del logo con el escudo “WB” contemporáneo, la fuente de Argo y las canciones de Led Zeppelin, Van Halen y The Rolling Stones que según Ben Affleck, “nos ponen ahí”, todo esto rematado con una combinación de secuencias dramáticas nuevas y archivísticas con espectaculares escenas de la revolución y la exacta recreación de las fotografías de la época en los créditos de clausura. La música del compositor cuatro veces nominado a los premios Oscar, Alexandre Desplat, contribuye muy vivamente a la velocidad y tensión desesperante de la cinta.

En realidad, todo esto fue posible gracias a un elenco fantástico. Alan Arkin como el viejo productor Lester Siegel está sensacional en todas las escenas en las que figura y tiene de lejos las mejores frases, junto con el igualmente increíble John Goodman como John Chambers, el maquillador hollywoodiense ganador de un Oscar famoso por su trabajo en la serie El planeta de los simios (que inspiró a Mendez a idear su plan de rescate). Juntos, con su química explosiva en la pantalla, representan la sátira de Hollywood y traen un toque cómico a una película, de lo contrario, muy seria.

Sin embargo, el final de la misma y por consiguiente el final de la misión de rescate seguramente no había sido tan dramático en la realidad como ha sido representado aquí al igual que unos detalles llevando a su clímax. En efecto, a pesar de una veracidad histórica aparentemente exacta, hay unos hechos que han sido distorsionados o enteramente cambiados por los propósitos de la dramatización.

Por ejemplo, en la película, vemos a Mendez obteniendo su visado para ir a Irán mientras está en Turquía, cuando esto en realidad tuvo lugar en la embajada iraní en Bonn. También viaja solo, pero durante la misión real tenía a un compañero llamado Julio. Asimismo, los seis americanos están representados como huéspedes duraderos del Embajador canadiense, pero en realidad tan sólo dos se quedaron con él. Los otros cuatro vivieron con un diplomático canadiense. La cinta muestra un tenso aborto de última hora de la misión por la Administración Carter y una lucha burocrática en la que Mendez audazmente declara que procederá con la operación de todas maneras. De hecho, Carter sí retrasó la autorización pero solamente una media hora, y el retraso tuvo lugar antes de que Mendez se marchase a Irán. La película muestra una tensa escena en el aeropuerto antes de la salida final, debido a unos fervientes guardias iraníes. En realidad, el vuelo fue retrasado bastante prosaicamente debido a un problema mecánico. La seguridad del aeropuerto y la aduana no representaron para nada un desafío. Finalmente, la escena de persecución final es una completa y absoluta fabricación.

Además, después del preestreno de la película en el Festival Internacional de Cine de Toronto en septiembre de 2012, surgieron críticas de que la película injustamente minimizó la participación del Gobierno canadiense, especialmente la del Embajador Taylor, en la operación de extradición. Esto incluyó añadir a la película varios acontecimientos ficticios por razones dramáticas, así como un texto de epílogo indicando que la CIA dejó a Taylor apuntarse el tanto por razones políticas, insinuando que no se merecía los cumplidos que había recibido. Ben Affleck declaró que “porque decimos que está basada en una historia verdadera, en vez de decir que ésta es una historia verdadera, se nos concede tomar cierta libertad dramática. Hay un espíritu de verdad”. Sin embargo, respondió cambiando el texto de epílogo para decir que “La implicación de la CIA complementó los esfuerzos de la Embajada de Canadá para liberar a los seis detenidos en Teherán. Hasta el día de hoy, la historia es presentada como un duradero modelo de cooperación internacional entre gobiernos”.

A pesar de los arriba mencionados comentarios (y otros lapsus que no hemos especificado aquí), Argo es una apasionante película con estilo y chispa y “la mejor mala idea” de Affleck que se merece todo el ruido “Oscar” que está causando. Y, además, tiene una frase que prontó se convertirá en una de las mayores citas de Hollywood: “¡Argo j---te!”.

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