Uno de los enfrentamientos más dispares que se produjo durante la Segunda Guerra Mundial fue la serie de combates entre Finlandia y la Rusia soviética: Talvisota (Guerra de Invierno) y Jatkosota (Guerra de Continuación).

El territorio finlandés, bajo dominio ruso desde 1809, inició los pasos de su independencia con el estallido de la Revolución Bolchevique de 1917, cuando el gobierno provisional anunció “la supresión de las medidas de rusificación y la convocatoria próxima de una asamblea representativa” 1. No obstante esta promesa, lo cierto es que Rusia mantuvo tropas y aunque en enero de 1918 el gobierno de los soviets reconoció la total independencia se suministró apoyo logístico y militar a la Punakaarti, versión finesa de la Guardia Roja, estallando un conflicto civil de inusitada violencia, y del que emergió la figura política y militar de Mannerheim.

Los acontecimientos posteriores se desarrollaron de una manera tan peculiar que la joven nación, que aun estaba cicatrizando las heridas y odios del conflicto civil, se encontró sola ante el ataque soviético de 1939 y tras la paz de 1940 forzada a establecer una incómoda alianza con la Alemania nazi en contra de un enemigo común.

La Guerra de Invierno

El origen del enfrentamiento entre las dos naciones se encuentra en los preparativos alemanes de la invasión de Polonia, cuando el ministro Ribbentrop firmó el Pacto de No Agresión con su homólogo soviético Molotov en agosto de 1939. Entre los protocolos secretos de dicho tratado se reconoció libertad absoluta entre las dos potencias para establecer su área de influencia respectiva en los estados bálticos, entre los que se encuentra Finlandia:

En el caso de que se produzcan modificaciones político territoriales en los Estados Bálticos (Finlandia, Estonia, Letonia y Lituania) la frontera septentrional de Lituania se considerará como el límite natural de las zonas de influencia de Alemania y de la URSS. Ambas partes reconocen, no obstante, los derechos de Lituania sobre el territorio de Vilna 2.

Casi de manera inmediata empezaron los movimientos diplomáticos soviéticos en el área. La URSS estableció bases en los tres pequeños estados bálticos y trató de conseguir por parte de Finlandia un intercambio territorial para asegurar la frontera y la seguridad de la cercana ciudad de Leningrado (actual San Petersburgo). Este primer intento diplomático producido en 1938 no llegó a ningún acuerdo, por lo que la Unión Soviética hizo un nuevo ofrecimiento en 1939 en el que propuso “un tratado de asistencia mutua, el arriendo de la base naval de Hanko, la parte occidental de la Península de los Pescadores […] algunas islas […] retrasar la frontera de Carelia hacia Viipuri, y la demolición de las fortificaciones de ambos países a lo largo de ella” 3.

El fracaso de las negociaciones derivó en el estallido del conflicto armado entra las dos naciones. El 30 de noviembre de 1939 el Ejército Soviético invadió Finlandia a lo largo de toda la frontera común, aprovechando la inferioridad numérica y de material finlandesa que constaba de “nueve divisiones y tres de reserva, con escaso material de artillería, solo 100 aviones y ninguna división acorazada o motorizada” 4. Con el despliegue de 5 ejércitos el mando soviético esperaba acabar con cualquier resistencia de manera rápida. No obstante las fuerzas finlandeses ofrecieron una tenaz resistencia llegando a paralizar el embate ruso. Ante estos éxitos, el mando finlandés organizó y puso en marcha un ataque contra las líneas soviéticas en diciembre de 1939, contraofensiva que fue detenida por el mayor poder de la artillería soviética. Después de este intento finlandés, el ejército ruso inició en febrero de 1940 una nueva ofensiva que arrolló al menguado ejército fines alcanzando la ciudad de Viipuri. En marzo Finlandia capituló y otorgó una serie de territorios a la Unión Soviética.


 

La Guerra de Continuación

Una serie de reivindicaciones por parte de la Unión Soviética (desmilitarización de las islas Aland, control de las minas de Petsamo, libre circulación de tropas soviéticas hasta la base naval de Hanko, entre otras) motivó el acercamiento de los intereses militares finlandeses hacia la Alemania nazi, lo que se materializó en la firma de una serie de acuerdos entre ambas naciones. En virtud del firmado en diciembre de 1940, Alemania se aseguro el derecho a estacionar tropas en Finlandia.

Si bien el gobierno finlandés movilizó al ejército en junio de 1941, éste no tomó parte en el inicio de la operación Barbarroja (invasión alemana de la Unión Soviética). Al contrario,  el ataque ruso contra Finlandia fue el pretexto utilizado para declarar la guerra el 26 de junio. Iniciaba así la Guerra de Continuación que para los intereses finlandeses significaba recuperar los territorios perdidos en 1940. La ofensiva finlandesa se inicia en julio de 1941 por dos frentes principales: el istmo de Carelia y el norte del lago Ladoga. En agosto alcanzaron las fronteras de 1939 y en diciembre se llegaron a las afueras de Leningrado, momento en el que se estabilizó el frente y se atrincheraron las tropas, situación que se mantuvo hasta mediados de 1944.

LAS PELÍCULAS

Si bien existen numerosas realizaciones sobre los grandes enfrentamientos de la Segunda Guerra Mundial, este conflicto que se enmarca dentro del anterior, no ha sido tratado fuera del contexto de la cinematografía finlandesa. Precisamente esta producción ha presentado con bastante acierto y rigor histórico la cadena de acontecimientos que tuvieron lugar entre 1939 y 1944. Por otro lado, uno de los films que se analizan a continuación –Tuntematon sotilas- se revela además como adaptación de gran fidelidad al original literario.

La Guerra de Invierno: Talvisota (Parikka, 1989)

El realizador Pekka Parikka filmó en 1989 esta desgarradora película sobre el enfrentamiento ruso fines acaecido entre el 30 de noviembre de 1939 y el 13 de marzo de 1940 conocido como Guerra de Invierno, basándose en la novela homónima de Antti Tuuri, quien también participó en la elaboración del guión. La acción se desarrolla en el Frente del Istmo de Carelia, y los protagonistas están encuadrados en la 1ª Brigada de Infantería, perteneciente a la 1ª División 5. Parikka recreó los acontecimientos principales de esta unidad, al ilustrar el viaje por la línea del frente, desde el acantonamiento en retaguardia, hasta su llegada al frente en el sector del Ladoga y su posterior traslado al área de Äyräpää y su participación en los duros combates en el río Vuoksi.

Con gran minuciosidad, acierto técnico y rigor histórico, a lo largo de 3 horas de metraje6 Parikka ilustra los acontecimientos previos y el desarrollo de la guerra entre los dos ejércitos cuyo balance total de bajas por ambos lados –entre muertos y heridos de diversa consideración- fue el siguiente:

FINLANDIA

66406

UNIÓN SOVIÉTICA

126875

1 2 3 4 5 6 7 >>


1. RENOUVIN, P: La crisis europea y la 1ª Guerra Mundial (1904 – 1918) Akal, Madrid, 1990; p. 372.

2. GONZALEZ SALCEDO, J. – RAMÍREZ ALEDÓN, G. Historia del mundo contemporáneo a través de sus documentos. Teide, Barcelona, 1989; p. 422. El texto completo tanto en alemán como en castellano se puede consultar en Exordio – Cronología de la Segunda Guerra Mundial [en línea] Disponible en web: <http://www.exordio.com/1939-1945/codex/Documentos/pactogerurrss.html> [Consulta: marzo de 2006].

3. VVAA: La guerra ruso-finlandesa. [en línea] Disponible en web:  <http://www.artehistoria.com/batallas/contextos/3865.htm> [Consulta marzo de 2006].


4. PORTAL MILITAR: Invasión de Finlandia [en línea] Disponible en web: <http://www.europa1939.com/ww2/1939/finlandia.html> [Consulta marzo de 2006].

5. Más adelante se ofrece el desglose de las tropas finlandesas y soviéticas desplegadas en este sector del frente y se señala las unidades militares identificadas en este film.

6. Las versiones utilizadas en este análisis son la original finlandesa en su metraje original y la versión editada para el mercado estadounidense en la que el metraje ha sido reducido y se han suprimido algunas secuencias que si bien no alteran el discurso histórico del film, hace que el espectador aprecie ciertas lagunas en cuanto a continuidad.