Gladiador: Post-modernización de la Antigüedad,
o "Romanizando" el Imperio Neo-liberal


TZVI TAL

Tel-Aviv University
tzvital@gvulot.org.il

 

La creciente ocupación académica en el film Gladiador (USA, Ridley Scott, 2000) ha demostrado fehacientemente la falsedad histórica de las imágenes cinematográficas, las incongruencias cronológicas, los errores geográficos y las distorsiones políticas que caracterizan el mundo ficcional "made in Hollywood".

El género fílmico histórico ha visitado frecuentemente aspectos limitados de Roma imperial. Gladiador no sólo repite ese esquema, sino también re-visita films anteriores. En lugar de enjuiciar el film y llegar a un veredicto sabido de antemano, propongo efectuar una lectura positiva, intentando una interpretación alegórica donde las marcadas deficiencias son comprendidas como componentes estéticos de una representación cuyo éxito en las taquillas indica su capacidad de expresar los sentimientos y las visiones del público global. Deformando la memoria histórica, Gladiador cumple funciones en los mecanismos de la identidad que construyen la "comunidad imaginada" del Imperio neo-liberal.

La lectura alegórica del texto fílmico no toma en cuenta "las intenciones del director", sino tiende a descubrir los paralelos y las reflexiones del mundo real en el producto simbólico. La alegoría es a veces una creación intencionada de los cineastas, que permite una lectura alternativa, tal vez subversiva, del film. Generalmente es una creación del espectador, que proyecta en las imágenes fílmicas su propio acervo de imágenes acumuladas, conocimiento y experiencias reales, posiciones ideológicas. Los procesos de identificación que se desarrollan en el espectador afectan a mecanismos esenciales de la personalidad hasta sus más íntimas pretensiones, lo inducen a determinada lectura del film coherente con los intereses que producen y distribuyen las mercaderías simbólicas. La lectura alegórica es un ejercicio intelectual, una práctica de resistencia del sujeto frente a la manipulación de los sentidos y la inducción ideológica.

Gladiador posee los atributos que caracterizan al cine post-moderno:

1 - La nostalgia por otras representaciones anteriores de Roma se constituye en mercadería lujosa de consumo masivo: película de altos costos, de envergadura épica. La inter-textualidad hecha recurso estético de uso intensivo se manifiesta en la sensación de "ya visto" en películas anteriores. Parece ser que la épica es el género más apropiado para construir imágenes de un sistema social que ha dejado obras monumentales y amplios narrativos históricos, pero pocas historias "de cámara" sobre la intimidad del sujeto romano particular. Más que nostalgia por la Roma histórica, Gladiador explota comercialmente la nostalgia post-moderna por las imágenes que la cultura hollywoodiense ha producido en el pasado no tan lejano de los grandes estudios. Fiel productor y reproductor de la identidad americana, el cine de los estudios expresa, en la Roma de celuloide, la identidad norteamericana que se vio a sí misma heredera de la tradición republicana, asentada en el Senado y el Capitolio de Washington.

2 - La post-modernidad ha superado la preocupación por el espacio. Vivimos conectados online, esperamos respuestas en "tiempo real" y ansiamos satisfacciones inmediatas para nuestros deseos. La comunicacion digitalizada destruye la sensación práctica de la barrera geográfica, el Tiempo es la dimensión donde buscamos solucionar nuestros problemas. Gladiador ofrece al espectador una satisfacción inmediata al utilizar el montaje cinematográfico para construir un Imperio de película donde la distancia geográfica no es obstáculo. El viejo truco creado en la máquina de compaginar es puesto al servicio de la cultura actual: Maximus atraviesa en instantes las distancias que separan las provincias romanas, permitiendo al espectador actual "vivir" la "aldea global" por intermedio del personaje ficcional que funciona como su vicario en la pantalla. En la carrera de Maximus de regreso a casa se conjugan Dorothy (El mago de Oz) con Forrest Gump. La historia y la ficcion mitológica se confunden sin problema. La post-modernidad hace patente la dis-armonía, la incoherencia de la vida social. Los anacronismo históricos en Gladiador son más expresión del caos actual que errores historiográficos.

3 - El cinismo post-moderno se desarrolla sobre la base del sinfín de desengaños que la situación actual nos propina. El cine post-moderno hace del cinismo un recurso estético, al ofrecernos deliberadamente escenas tan engañosas que inevitablemente nos hacen dudar de su verisimilitud. Gozamos del vano intento de confundirnos y pagamos por él. Gladiador recupera este aspecto, especialmente en la escena de guerra en el bosque o el combate contra los tigres, en la pornografía de la violencia y la carne desgarrada. Tambien la narrativa transmite el cinismo, como la increíble entrega del poder a los políticos que no han hecho nada por expulsar al tirano o el deseo insistente de vivir su vida particular que expresa Maximus.

4 - La post-modernidad comercializa y folcloriza manifestaciones de las culturas. La banda de sonido de Gladiador difunde sonidos "étnicos" que contribuyen a la sensación "global". El cine post-moderno se apropia de estéticas alternativas y las conjuga en sus productos simbólicos. En la versión proyectada en Israel se presentan los titulares con el elenco y los principales creadores al final, truco ya utilizado por ejemplo en The Rumble Fish (Coppola). La legitimidad de la medicina alternativa y el espiritualismo "New Age" propios de nuestro tiempo, son visibilizadas de forma simpática.

5 - La post-modernidad es la cultura que florece durante el capitalismo tardío. El Neo-liberalismo es la ideología económico-social que racionaliza la situación actual. Las sociedades nacionales son dominadas por elites de poder financiero-político, cuyas bases de poder están en el gran capital global. El sistema electoral se va convirtiendo en una formalidad periódica que legitimiza políticas ecónómicas anti-populares. El bombardeo ideológico satura la conciencia del sujeto con el mensaje unilateral "no hay otro sistema posible". Cuando el sistema global en expansión encuentra resistencia, la caracteriza como "irracional" o "fundamentalista". La somete bombardeando al pueblo con la esperanza de "hacer entrar en vereda" a los tiranos (Saddam Hussein y Milosevic no fueron destronados por las coalizaciones occidentales). En realidad el Sistema neo-liberal en expansión, como el Imperio romano en el pasado, no está realmente preocupado por el estado de las masas populares, sus derechos humanos y civiles o su nivel de vida. El nuevo Imperio impone el derecho de las masas a McDonalizar sus hábitos de consumo. Las masas en Gladiador son un decorado, el transfondo que realza el accionar del héroe individualista hollywoodiense disfrazado de general romano. Como el jinete solitario del Western que elimina el desorden en el pueblo para luego seguir cabalgando, Maximus re-establece el orden republicano y entrega el poder a una elite de políticos oligárquicos. Como en las eleccciones modernas, el Circo permite a la comunidad reconocerse a sí misma definiendo con quien se identifica, a quién vota o aplaude. El juego del poder se maneja entre las elites. Tambien Maximus es un miembro de la elite, incluso durante su cautiverio como gladiador, es el selfmade man del mito norteamericano. Como las masas anónimas del film, las masas actuales consumen el espectaculo fictivo de la democracia parlamentaria, pero los políticos corruptos, como los actuales agentes del Fondo Monetario Internacional o del gran capital global, son preferidos por el film al gobierno militar.

En Gladiador podemos ver la reflexión alegórica del Imperio neo-liberal y su cultura post-moderna. El proceso catártico envía al espectador de regreso a casa satisfecho con el sistema donde el poder está en manos de una elite política "profesional" y donde el ejército respeta las autoridades civiles legítimas. La extensa escena del combate con las fieras donde culmina el film es como un juego de espejos entre nuestro mundo y el mundo ficticio: Pan y Circo, Película y Pop-corn para las masas romanas y las masas actuales. La política se decide, como en la época antigua, entre los miembros de las elites. Los "bárbaros" que están fuera del "sistema" deben ser conquistados o exterminados. El sujeto particular debe ser individualista y desconfiado -como dice el manager de los gladiadores antes de morir-. Y la mitad de la humanidad -las mujeres-? La "buena" mujer paga con su vida el precio de su honestidad y fidelidad. La "mala" mujer puede redimirse sirviendo los intereses personales del héroe ascético. Moraleja que atiende a otros sucesos en el Capitolio contemporáneo.